Ayer, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social de Guatemala, confirmó que ordenó el retiro de carne de res en los únicos lugares donde se controla a medias: en supermercados de la capital de Guatemala, por haber detectado trazas de clembuterol.
En el resto de puntos de venta de carne de todo el país, (mercados y carnicerías) prácticamente no existe control alguno y la población compra carne de res con, literalmente, un veneno que produce efectos en el mediano plazo en seres humanos.
Los ganaderos lo usan porque hace ganar peso en el ganado, aunque la ley lo prohíbe. Es un anabolizante que hace engordar en forma artificial el ganado, pero produce efectos dañinos a los seres humanos.
Es tanta la falta de control, que es común que las personas que comercializan la carne, es decir, los intermediarios que compran el ganado ya «engordado», le exige a los ganaderos que utilicen el clembuterol y les rechazan el ganado que no se ha engordado artificialmente.
El consumo de carne de res con clembuterol produce efectos secundarios como temblores de cuerpo, aumento de frecuencia cardíaca, alta glucosa en la sangre, ansiedad, agitación y sudoración, entre otros.
El Ministerio de Salud Pública y asistencia social, emitió ayer, 07 de diciembre, una alerta, pidiendo a todas las personas que han consumido carne de res con clembuterol, para que acudan inmediatamente a los servicios de salud para verificar si han sido afectados en su salud.
Cuando usted compre carne de vaca, asegúrese que no haya sido engordada con clembuterol, porque le podría provocar graves daños a su salud.
